Un viaje al Super Bowl XLIX en Phoenix le costará, incluso a los aficionados más exigentes, miles de dólares, mientras que será una ganancia considerable para los dueños de negocios que estarán en uno de los fines de semana de mayor gasto del año en Estados Unidos.
Modelos de Victoria’s Secret que estarán en mesas de 25,000 dólares, ofertas de boletos sospechosas y compras riesgosas en línea para tener asientos en el Super Bowl se han convertido en parte de la celebración anual del deporte favorito de Estados Unidos, tanto como el lanzado de la moneda inaugural.
Con tanto en riesgo, muchos aficionados no dejarán nada a la suerte en la carrera por reservar hoteles de lujo, limosinas, y algunas de las fiestas más lujosas del año; sin mencionar, los boletos al gran partido.
Como resultado, una solución antigua de antes de los días de internet surgió como la ganadora; el paquete de hospitalidad.
"Es una situación que le añade valor”, dice Anbritt Stengele, dueña de Sports Traveler de Chicago, quien vendió sus pocos paquetes restantes del Super Bowl el viernes pasado.
“Los hoteles ya no están disponibles”, dice, explicando que hay una demanda extra para las habitaciones de cuatro y cinco estrellas en el fin de semana debido al Abierto de Phoenix, un torneo de la PGA de cuatro días, con Tiger Woods, que concluye el domingo del Super Bowl.
Para los clientes de Sports Traveler, puedes comenzar a beber desde las 11:30 horas el día del partido con una “Fiesta Touchdown Club” que incluye barra libre y buffet que dura hasta que comienza el partido a las 15:30 horas.
Entendiblemente, se coloca un costo adicional por transporte libre de problemas desde los hoteles de Scottsdale hasta el Estadio de la Universidad de Phoenix, a 40 minutos en automóvil.
"Las personas quieren divertirse un poco; no quieren ser el conductor designado”, explica. “Solo quieren que se ocupen de todo y que esté garantizado. Sí, puedes hacerlo tú mismo, pero muchas personas escogen no hacerlo”.
Al trabajar en su décimo quinto Super Bowl desde que su empresa comenzó, cuando era estudiante en la Universidad Saint Xavier en Chicago, Stengele reserva cuadras de hoteles en ciudades del Super Bowl con 12 meses de anticipación. Ya empezó su búsqueda de habitaciones en San Francisco, en preparación para el Super Bowl 50, que se jugará cerca de Santa Clara. Ofrecer esa disponibilidad escasa, junto con un boleto del partido, resulta ser una ventaja sobre los sitios de reserva de hotel, dice.
En su última etapa, el paquete básico que queda en el sitio SBTickets.com comienza en 6,000 dólares por un boleto de Super Bowl en la ‘Zona Superior del Último Nivel’ (es decir, lo más hasta atrás), una estancia de cuatro noches en un hotel de tres estrellas, transporte en el día del partido y festividades antes del juego. La cotización es por persona con base en una habitación doble. Las habitaciones sencillas comienzan en 7,000 dólares y los vuelos no están incluidos.
El precio más barato del Super Bowl en el sitio de boletos SeatGeek al momento de escribir este artículo estaba en 3,507 dólares, valorando lo añadido y la conveniencia de un paquete en 2,493 dólares por persona.
El 70% de los clientes de Sports Traveler son miembros corporativos, muchos de los cuales pidieron que se agregaran momentos para jugar golf y boletos para el torneo PGA. El conjunto restante son aquellos que ‘buscan cumplir sus sueños’ y buscan asistir a cualquier Super Bowl, aficionados internacionales (principalmente australianos), y por supuesto, aficionados de los Seattle Seahawks y de los Patriotas de Nueva Inglaterra que esperaron a veri si sus equipos clasificarían (solo los que tienen boletos de temporada más costosos tienen asientos para el gran partido).
Conejitas y champaña
Luego están los fiesteros; muchos fiesteros.
El concepto de organizar eventos temáticos de solteros antes del Super Bowl comenzó hace más de 10 años y ha adquirido un nuevo ámbito de competencia. Cada año, revistas como Rolling Stone, Maxim y Playboy intentan superarse entre sí para atraer a las bandas, modelos y personalidades más famosas a sus fiestas, concediendo el acceso a precios altísimos.
"La noche del sábado antes del Super Bowl realmente es cunado todos quieren salir”, dice Stengele, al añadir que la fiesta de Playboy a menudo está al principio de la lista de demanda de sus clientes corporativos.
"Es un evento de chicos, absolutamente”, dice, sobre la fiesta que anuncia 24 conejitas de Playboy hablando con invitados, mientras el rapero Nelly es el Maestro de Ceremonias. Todos los boletos incluyen barra libre y buffet.
¿Pero qué más hace que valga la pena la cuota de entrada de 850 dólares?
“Puedes utilizar tu imaginación”, dice. “Hay muchas chicas allí y mucha bebida. Es una experiencia”.
"Todo jugador superestrella que no aparecerá en el Super Bowl hará una aparición [pagada] en uno o dos de esos eventos antes del partido”, dice Ahmad Tahoun, quien organizó la fiesta de victoria de Super Bowl de los Gigantes de Nueva York en Phoenix en 2008.
"Imagina un club nocturno dos noches antes del Super Bowl con nada más que atletas jóvenes multimillonarios que compiten por lo que gastan”, añade. “Es solo champaña y brillo en todos lados”.
El boleto más popular de este año es el de la fiesta de la revista Rolling Stone, con presentaciones de Steven Tyler de Aerosmith y Charli XCX. Los boletos comienzan en 1,045 dólares y llegan a 56,238 dólares por una mesa Platino en rukkus.com.
Paquetes de lujo
La fiesta Leather and Laces organizada por Victoria’s Secret comienza en 495 dólares por un asiento lounge, sube a 2,500 dólares para conocer a Adriana Lima y Lily Aldridge, y llega hasta 25,000 dólares por una ‘Cabana Celebridad’ (incluye 14 boletos, 10 botellas de licor premium y tres botellas de Champaña Moet).
Aunque Tahoun señala que las fiestas a las que asisten celebridades están cerradas al público que paga, algunas fiestas anunciadas como solo con invitación son todo lo contrario. Los boletos de admisión general para la “Fiesta Solo con Invitación de la Noche del Supersabado de DirecTV”, que tendrá una presentación de Rihanna, se ofrecen en vividseats.com por 970 dólares.
Aunque arreglar boletos para las fiestas normalmente es un proceso adelantado para las agencias (los promotores ofrecen las primeras compras), adquirir boletos para el Super Bowl es otra cuestión completamente.
Stengele dice que adquiere algunos boletos a través de promotores corporativos, pero se niega a revelar exactamente cómo llena el resto de sus obligaciones de boletos.
Forjar vínculos con aquellos que tienen acceso, junto con el mercado secundario de boletos (boletos revendidos en línea a precios que cambian con base en la oferta y la demanda) son dos métodos, de acuerdo con Will Flaherty de SeatGeek.
"Muchos equipos tienen acuerdos con vendedores de entrada y venden sus boletos por adelantado”, dice, señalando una controversia el año pasado cuando los Broncos de Denver y los Seattle Seahawks vendieron boletos del Super Bowl en Prime Sport. “No es algo que los equipos quieren que sepan las personas, particularmente los equipos que clasificaron”.
Además, Flaherty dice que muchos agentes trabajan especulativamente en el mercado secundario de boletos, como corredores de bolsa. Sin tener el inventario, harán acuerdos para vender boletos en las dos semanas antes de las semifinales de los playoffs.
Acuerdos de último minuto
Una vez que se determinan los oponentes del Super Bowl, los precios normalmente caen 1,000 dólares en las dos semanas antes del partido, dice Flaherty. La caída permite que los agentes cubran su total al comprar boletos más baratos más cerca del partido a un margen saludable. La tendencia se volvió consistente en los últimos cuatro años, según datos proporcionados por SeatGeek, que coloca una calificación de valor en los boletos disponibles en la web.
Sin embargo, durante la carrera de este año, las fuerzas del mercado trabajaron de forma opuesta, impulsando el precio promedio del boleto hasta a un 40% de una semana antes a 4,126 dólares, dejando potencialmente a quienes toman riesgos en agitación unos días antes del Super Bowl.
Sin embargo, los corredores más astutos evitan la especulación del mercado por medios menos escrupulosos.
“No es poco común escuchar historias de agentes con maletines llenos de dinero que vuelan a Phoenix para comprar boletos del Super Bowl a jugadores en los vestíbulos del hotel”, dice Flaherty, al señalar que a cada jugador y entrenador de la NFL se le dan dos boletos del Super Bowl para comprar a un valor nominal. Revender los boletos para obtener ganancias va en contra de las reglas de la NFL, una violación por la que el entrenador de los Vikingos de Minnesota, Mike Tice, fue multado con 100,000 dólares en 2005.
Flaherty aconseja a los aficionados a esperar unos días antes del domingo del Super Bowl para comprar, cuando se adquieren a menudo las ofertas de último minuto. Tahoun sugiere lo mismo para quienes van a las fiestas: “Una vez que legas y tus pies están en el suelo, puedes negociar mejores paquetes”, dice.
Para algunos aficionados, competir por los mejores paquetes fuera de la cancha es parte de la diversión. Sin embargo, la mayoría preferiría adentrarse en lo que Phoenix tiene que ofrecer y dejar la estrategia a los profesionales.
Fuente: CNNMéxico
